
La epidemia, ahora pandemia, del nuevo coronavirus está avanzando a un ritmo vertiginoso. Afortunadamente, también es el caso de los estudios y la evidencia científica sobre el virus (SARS-CoV-2) y la enfermedad (COVID-19).
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→ Tras una vacuna contra el nuevo coronavirus
→ China aprueba el ensayo de vacuna en humanos
Fuente: ISGlobal Evidencia publicada entre el 18/03/2020 y el 26/03/2020
Síntomas, evolución clínica y letalidad: últimos datos
En cuanto al porcentaje de casos asintomáticos, un par de estudios recientes sitúan la cifra entre 17 y 30 %. Sin embargo, será necesario realizar estudios serológicos a gran escala para estimar la verdadera cifra de personas infectadas pero asintomáticas.
Según el último informe de la ECDC, que agrupa un total de 43.438 casos de 17 países europeos, las hospitalizaciones han ocurrido en 30% de los casos confirmados, y 4% de los casos han necesitado cuidados intensivos o asistencia respiratoria.
→ Mapa interactivo del coronavirus
¿Un marcador pronóstico de riesgo?
Un estudio que analizó la carga viral (o cantidad de virus presente en una muestra) en 76 pacientes con síntomas moderados a severos proporciona dos informaciones importantes. La primera, es que la carga viral alcanza el pico máximo al momento de desarrollar los primeros síntomas, confirmando que esa es la ventana de tiempo (un par de días antes y un par de días después) en que el paciente es más contagioso. La segunda es que los casos severos tenían una carga viral mucho mayor que la de los casos moderados. Esto quiere decir que la carga viral al inicio de la enfermedad puede ser un buen marcador pronóstico de evolución.
Tratamiento
Un ensayo global, cuatro tratamientos
La OMS anunció el lanzamiento de SOLIDARITY, un ensayo clínico a nivel global para testar los 4 tratamientos que considera más prometedores: el antiviral remdesivir (inicialmente probado para el ébola), la combinación lopinavir/ritonavir (para tratar el VIH) con o sin interferón beta (una molécula con propiedades antivirales), y la cloroquina o hidroxicloroquina (un medicamento antimalárico). El ensayo incluirá a miles de pacientes en docenas de países.
Anticuerpos
Según la revista Nature, los hospitales en Nueva York se están preparando para usar la sangre de gente que se ha recuperado de la enfermedad como tratamiento. La idea de usar “suero convaleciente” que contiene anticuerpos contra el virus no es nueva – se ha probado para tratar otras enfermedades como el ébola, aunque sin resultados concluyentes. Varios hospitales participarán en ensayos para probar su eficacia terapéutica (tanto en casos severos como al principio de la enfermedad) o incluso preventiva (en trabajadores sanitarios).
Por su parte, una compañía americana ( Vir Biotechnology ) anunció que dos de sus anticuerpos producidos en el laboratorio son capaces de neutralizar al SARS-CoV-2, por lo que comenzarán a testarlos en personas en los próximos tres meses.
Una vieja vacuna
Equipos en Australia, Grecia y los Países Bajos comenzarán un ensayo clínico para probar si la vacuna contra la tuberculosis puede reforzar la respuesta inmune contra el SARS-CoV-2 y evitar o atenuar la enfermedad. Hay evidencia de que la vacuna, desarrollada hace cien años y de limitada eficacia para la tuberculosis, tiene un efecto “potenciador” sobre el sistema inmune.